¿Qué es la apnea del sueño?

 

La apnea del sueño es una afección en la cual una persona tiene episodios de obstrucción de la respiración durante el sueño.

 

Es una enfermedad seria, potencialmente mortal y que es mucho más frecuente de lo que se cree. Se produce en ambos sexos y en todos los grupos de edad. Es más frecuente en los hombres, aunque puede estar poco diagnosticada en las mujeres. Se calcula que entorno a un 10% de la población puede potencialmente padecer la enfermedad.

 

Es importante diagnosticar y tratar a tiempo la apnea del sueño, ya que se asocia con lo siguiente:

  • Arritmias cardíacas.
  • Hipertensión arterial.
  • Fallo cardíaco.
  • Embolia cerebral.

¿A quién afecta la apnea del sueño?

La apnea del sueño parece afectar a algunas familias, lo cual sugiere una posible base genética. Las personas más propensas a tener o desarrollar apnea del sueño incluyen los que:

  • Roncan sonoramente.
  • Tienen sobrepeso.
  • Tienen la presión de la sangre alta (hipertensión arterial).
  • Tienen alguna anomalía física en la nariz, la garganta u otras partes de las vías respiratorias altas.

El consumo de alcohol y el uso de pastillas para dormir aumenta la frecuencia y la duración de las pausas en la respiración de las personas con apnea del sueño.

 

¿Cuáles son las características de la apnea del sueño?

 

La apnea del sueño se caracteriza por una serie de pausas involuntarias de la respiración durante el sueño en una sola noche - pueden producirse de 20 hasta 30 o más eventos cada hora. Estos eventos están casi siempre acompañados por ronquidos entre los episodios de apnea (aunque no todas las personas que roncan tienen apnea del sueño). La apnea del sueño se puede caracterizar también por sensación de asfixia. Las interrupciones frecuentes del sueño profundo y reparador provocan a menudo dolores de cabeza por las mañanas y sueño excesivo durante el día.

 

¿Cuáles son las causas de la apnea del sueño?

 

Ciertos problemas mecánicos y estructurales de las vías respiratorias provocan las interrupciones de la respiración durante el sueño. La apnea se produce en los siguientes casos:

  • Cuando los músculos de la garganta y de la lengua se relajan durante el sueño y bloquean parcialmente la apertura de la vía aérea.
  • Cuando los músculos del paladar blando de la base de la lengua y la úvula se relajan y se hunden, la vía respiratoria queda bloqueada, haciendo la respiración laboriosa y ruidosa o incluso deteniéndola totalmente.
  • En las personas obesas, cuando un exceso en la cantidad de tejido en la vía aérea la hace más estrecha.
  • Con una vía aérea estrecha, la persona continúa esforzándose por respirar, pero el aire no puede pasar con facilidad a través de la nariz o la boca.


¿Qué síntomas da la apnea del sueño?

 

Los síntomas principales generalmente están asociados con somnolencia diurna excesiva:

  • Somnolencia diurna anormal, incluyendo quedarse dormido a horas inapropiadas
  • Despertarse cansado en la mañana

Otros síntomas pueden abarcar:

  • Depresión
  • Dificultades de memoria
  • Dolores de cabeza matutinos
  • Cambios de personalidad
  • Concentración deficiente
  • Sueño intranquilo e intermitente
  • Despertarse con frecuencia en la noche para orinar
  • Insomnio

 

¿Cómo se diagnostica la apnea del sueño?

 

Existen varios exámenes para valorar si una persona padece apnea del sueño, incluyendo los siguientes:

 

  • Polisomnografía - examen que registra diversas funciones del cuerpo durante el sueño, como la actividad eléctrica del cerebro, el movimiento de los ojos, la actividad de los músculos, la frecuencia cardiaca, el esfuerzo respiratorio, el flujo de aire y las concentraciones de oxígeno en la sangre.
  • Prueba de Latencia Múltiple del Sueño (su sigla en inglés es MSLT) - examen que mide la velocidad con que una persona se queda dormida. Las personas sin trastornos del sueño suelen tardar un promedio de entre 10 y 20 minutos en quedarse dormidas. Las personas que se quedan dormidas en menos de cinco minutos es probable que necesiten algún tipo de tratamiento para los trastornos del sueño.

Los exámenes de diagnóstico suelen realizarse en unidades del sueño, pero las nuevas tecnologías pueden permitir que se realicen algunos estudios en la casa del paciente.

 

¿Cómo se trata la apnea del sueño?

 

Los medicamentos no son generalmente eficaces en el tratamiento de la apnea del sueño. La terapia de la apnea del sueño se diseña específicamente para cada paciente, y puede incluir lo siguiente:

 

  • La administración de oxígeno puede resultar beneficiosa y segura para ciertos pacientes, aunque no elimina la apnea del sueño ni evita la somnolencia diurna. Su papel en el tratamiento de la apnea del sueño es polémica.
  • Los cambios conductuales constituyen una parte importante del programa de tratamiento, y en los casos leves de apnea del sueño puede ser suficiente con la terapia de la conducta. Se le puede aconsejar al paciente:
    • Que evite el consumo de alcohol.
    • Que evite el uso del tabaco.
    • Que evite el uso de pastillas para dormir.
    • Que pierda peso si es obeso.
    • Que utilice almohadas o alguna otra cosa que le permita dormir de lado.
  • Terapia CPAP
    La presión positiva continua en la vías respiratorias (su sigla en inglés es CPAP) es un procedimiento en el que el paciente se pone una mascarilla sobre la nariz mientras duerme y un aparato le introduce aire a presión a través de la nariz.
  • Los aparatos dentales que vuelven a colocar en su sitio la mandíbula inferior y la lengua son útiles en algunos pacientes con apnea del sueño leve, o que roncan pero no tienen apnea.
  • Cirugía
    Algunos pacientes con apnea del sueño pueden necesitar una operación. Entre los procedimientos quirúrgicos se incluyen los siguientes:
    • Intervenciones quirúrgicas tradicionales para extirpar los adenoides, las amígdalas, los pólipos nasales u otros tumores de las vías aéreas y para corregir las deformidades estructurales.
    • Uvulopalatofaringoplastia (su acrónimo en inglés es UPPP) - un procedimiento que se utiliza para extirpar el exceso de tejido de la parte posterior de la garganta (las amígdalas, la úvula o campanilla y parte del paladar blando).
    • La reconstrucción quirúrgica de las deformidades de la mandíbula inferior puede ser útil en algunos pacientes.

Las intervenciones quirúrgicas para tratar la obesidad se recomiendan en ocasiones a pacientes con apnea del sueño que padecen obesidad patológica.